Ángela había comprado aquella novela y luego de leer los primeros capítulos había acabado llorando, reviviendo los momentos que había tenido que afrontar años atrás. Odiaba sentirse de ese modo y la sensibilidad que producía en ella.
Jesús comenzaría las clases en un colegio nuevo y extrañaba a sus antiguos compañeros. Sentía miedo de no ser aceptado allí y también una gran expectativa por lo que su madre le había dicho que sería una nueva aventura.
-¿Tienes todas tus cosas?- Le preguntó Ángela y lo peinó prolijamente
-No todas mami. Todos los niños van con su mamá y su papá a su primer día de clases. Desearía tener papá- Aquel comentario tan sincero le rompió el corazón a su madre
-Algún día tendrás alguien a quien llamar papá, ¿De acuerdo?- Quiso sonar segura, aunque su voz delató toda su inseguridad
Ángela había recordado cómo fue convivir pocos días con Vincent, compartir cada aspecto de su vida y también cuando estuvieron juntos. Sabía que probablemente si no hubiese existido