La envidia brilló en los ojos de Annie, al ver cómo la niña de Samantha se ganaba fácilmente el corazón de su padre adoptivo.
A ella le molestaba que Samantha pudiera tener una niña tan adorable a pesar de haberse acostado con un viejo feo.
Justo cuando pensaba que sus celos estaban en su punto máximo, Ethan entró, sosteniendo a un niño que se parecía exactamente a él; ¡Una versión en miniatura del gran Ethan Wright!
Annie Davis se quedó boquiabierta mirando a Ethan y al niño. Ella escuchó vagamente las presentaciones de Samantha, pero se concentró en el parecido de los dos.
Finalmente, su futura suegra rompió el silencio y preguntó: "Por qué... ¿por qué... tu hijo se parece tanto a Ethan?".
"Sí, qué coincidencia", comentó su padre adoptivo, Winfield Davis, también con la mirada de un lado a otro a Ethan y al niño.
"Erm... no, en realidad padre... no lo es". Annie escuchó a Samantha responder, prácticamente ruborizándose cuando dijo eso.
Eso hizo que Annie frunciera el ceño y cu