Por Melina
-¿Quién es ese chico que te ha traído últimamente?
Esa es mi madre.
Ni un hola, ni preguntar como me fue en mi examen, nada de nada.
-Un compañero de la facultad.
-Tiene un auto caro.
-Sí, tiene plata...los padres tienen plata.
-Mirá que los ricachones son los primeros en dejarte si te quedás embarazada y sabés que no te quiero acá si te pasa eso.
-¡Mamá!
-Por eso lo quería tanto a Albertito, él sí te respetaba.
Me hace reír, no sé lo que es para ella la palabra respeto, seguro que esa palabra no la conoce.
-Albertito- digo con sorna- era un idiota, un mujeriego que andaba con otras.
-Bueno, vos sos una caprichosa y por no saber cuidarlo ni perdonarlo, lo perdiste.
Mi madre estaba loca, yo no fui la culpable de nada…
-En todo caso, él me perdió a mí.
-No sabés lo que decís, no vas a encontrar nunca en tu vida a alguien como él.
Eso era demasiado.
-Ni quiero.
Mi madre no puede creer lo que le digo, ni que le conteste así, siempre traté de contenerme, pero estoy cansada, Albe