Alcance a victoria a mitad de camino, ella estaba furiosa, parecía uno de esos pequeños perro de pelo dorado.
- puedes dejar de ser tan molesta? aun ni siquiera hemos almorzado!
ella se cruzó de brazos lista para decirme algo mordaz.
- Ni siquiera puedo mirar a los ojos a todas esas personas! Y todo es por tu culpa! Cómo pudiste hacerme hacer algo así!
Yo? Ella no se quejo cuando lo estaba haciendo, ahora yo era el culpable! Es el colmo!
-Lo disfrutaste Victoria, eso no lo puedes negar, ahora deja de ser tan molesta y vamos a entrar!
Ella respiro profundo y me miró con mala cara.
-No! Es que me da vergüenza! Así como tú hermano se dió cuenta, estoy segura que todos allí lo hicieron también!
Agarre la mano de victoria y la arrastre conmigo de vuelta a lobby del hotel, allí todos nos volvieron a mirar, y si! Todas las miradas eran dirigidas a victoria, y lo que más me molestaba es que me daba rabia! No quería ojos sobre victoria, después de lo que habíamos hecho yo la quería solo par