AMOR OCULTO. 14- EL VERDADERO MENTIROSO.
—¿Qué haces acá? —lo miré un poco sorprendida y cansada.
—Vine porque… Creo que debemos hablar.
—No tengo tiempo ahora.
—Anika, por favor.
—Sam, tengo que hacer maletas, llamar a papá, tengo que… hacer muchas cosas.
—Necesito que me escuches.
—¿De qué hablas?
Se puso de pie, se acercó a mí y me abrazó. Se veía realmente triste, contrariado, dolido. No sabía cómo interpretar esa actitud, pues Sam nunca antes la había tenido.
—Voy a tomar una ducha y luego vendré aquí para que hablemos,
—Si, te espero.
Sam se sentó de nuevo en el sofá, pasó por un lado y me metí de lleno en mi habitación sin saber exactamente qué hacer, quería salir corriendo y refugiarme en mi soledad, pero también sabía que los problemas no se solucionan de esa manera.
Tenía que renunciar y alejarme de Ismael, eso era un hecho.
—Anika —Sam me llamaba desde la puerta.
—Déjame en paz.
—Por favor —su voz estaba cada vez más apagada.
Suspire y deje que entrara a la habitación, había tomado una ducha rápida y solo había