Esta boda en general había resultado aceptable, pero al final dejó a Julieta con cierta amargura en el corazón. Su hermosa boda, la boda que había esperado tantos años, al final había sido arruinada por Andrea.

En su primera noche de casados, la habitación nupcial estaba arreglada en la villa donde Miguel y Andrea habían vivido antes. Pero después de un día agotador, Miguel obviamente no tenía mucho ánimo.

Por la noche, después de que Julieta se bañara, se acostó a su lado. Miguel leía un libro mientras ella lo abrazaba.

—Miguel, se siente como un sueño, que realmente nos hayamos casado. De ahora en adelante seremos las personas más cercanas.

Solo entonces Miguel dejó el libro y también la abrazó.

—Bueno, hoy también te cansaste mucho, mejor durmamos temprano.

Viendo que Miguel iba a apagar la luz, Julieta se incorporó: —Miguel, en realidad hay algo que quiero discutir contigo.

Miguel también se enderezó para mirarla.

—Estaba pensando que ahora que ya nos casamos, formamos una nueva fa