✧✧✧ Esa mañana. En los calabozos de la manada Garra Dorada. ✧✧✧

CRANK~

El portón de hierro se cerró tras Alfa Zefor y el Beta Woren.

La luz de las antorchas apenas alcanzaba para iluminar el rostro de Jareth, que estaba encorvado en una esquina, esposado, con la cabeza baja y el cabello desordenado, algunos mechones cayéndole sobre el rostro.

Tenía las rodillas dobladas contra el pecho y la espalda apoyada en la pared de roca, pero al escuchar los pasos de su padre, no alzó la vista. Su respiración era lenta… como si estuviera conteniéndose.

Uno de los hombres lobos guardianes abrió la celda.

CLANK~

—Levántate —ordenó el Rey Alfa, con voz baja pero firme.

Jareth no se movió.

—Te dije que te levantes —repitió Zefor.

El chico soltó una risa amarga, sin levantar la vista.

—¿Para qué? ¿Vas a matarme sentado o de pie…? —dijo Jareth, con voz ligeramente temblorosa.

Woren intercambió una mirada rápida con el Alfa, pero Zefor mantuvo la calma. Dio un paso más. El crujido de