Capítulo 52

Las hojas del calendario caían rápidamente y los días transcurrían como un pestañear, no podía creer que Diana estuviera a punto de cumplir 1 año, y el día tan esperado llegó.

Como era de suponerse, el contrato quedó cancelado porque obviamente nada era como al inicio. De pronto me encontré mirando el pasado y fue extraño verme en un presente tan maravilloso como ese.

Nuestra niña crecía en belleza y tamaño, todo mundo que la conocía quedaba encantado porque sinceramente Diana era la bebé más hermosa del mundo. La luz de nuestras vidas y sobre todo de su padre, Max tenía una gran devoción por ella que me enamoraba aún más de él, verlo preocuparse por nuestra hija, levantarse de madrugadas, darle de comer, bañarla en muchas ocasiones fue algo maravilloso. En definitiva se había convertido en el mejor padre de todos... Por otra parte, mi relación con Nikolay mejoraba día con día, ambos establecimos una estrecha relación donde cada fin de semana teníamos una cita en un bonit