Víctor se burló con desdén.

—Víctor, no te vuelvas demasiado arrogante. ¿Realmente crees que la familia Ortiz te teme?

—En resumen, te daré una última oportunidad. Libera a Domingo de inmediato y fingiremos que este incidente nunca ocurrió.

—De lo contrario, después de esto, la familia Ortiz aplastará sin piedad a la familia Bravo.

La mirada del señor Ortiz estaba llena de fría determinación y un asesinato ardiente en sus ojos.

La fuerza y el poder de Víctor y Fernando eran inferiores a los de las Cuatro Grandes Familias. Con el poder de la familia Ortiz, si realmente estuvieran decididos a aplastar a Víctor, ciertamente podrían lograrlo.

—Señor Ortiz, no me asustas. ¡Yo, Víctor, no soy alguien que se asuste fácilmente!

—Aunque la fuerza de la familia Bravo no se compara con la de la familia Ortiz, si la familia Ortiz se atreve a atacarnos, incluso si eso significa la destrucción de la familia Bravo, yo los golpearé severamente.

Víctor habló fríamente.

Dañar al enemigo incluso a costa