Capítulo 91.
Guardo silencio por un par de segundos, mirando a mi padre de manera incrédula, hasta que finalmente encuentro las palabras para responder.
—¿Vergüenza? ¿Por qué piensas que yo haría algo como eso? —pregunto comenzando a alterarme.
Recordando que ya no llevo el vendaje, rápidamente cubro mi rostro con una de mis manos, bajando la mirada de manera apenada.
—¿Es por qué soy horrible ahora? —pregunto volviendo a llorar.
—Amara, no tiene que ver con tu aspecto, no todo gira alrededor de tu belleza —papá comienza a perder los estribos— ¿Por qué siempre eres tan vanidosa?
—Si no es por eso, ¿Entonces por qué no quieres que vaya?
—¿De verdad quieres que hable?
Puedo verlo en sus ojos, es la misma mirada que me dió cuando se enteró de que ya no era virgen en el primer juicio de Raven, o cuando descubrió que yo tuve un papel menor en el escape de Raven de prisión.
Decepción absoluta…
—Amara —papá cierra los ojos, intentando controlarse—, estoy pasando por un momento muy difícil en la manada,