No me interesa.
Jennifer lo miró en estado de shock.
—Quiero que me des la oportunidad de demostrar que hay alguien que te amará más que a nada.
—¡Daniel!
— Daniel se dio la vuelta y vio al Sr. Edward, Alexander y Mario están parados en la puerta.
—Tenemos que hablar —dijo el Sr. Edward y entró.
—Daniel recogió a Jennifer, la llevó a la habitación y la sentó en la cama.
Angelina y Anna, quienes le dirigieron una sonrisa tranquilizadora.
Luego, Daniel camino hacia la puerta con Mario y Alexander de pie con las manos cruzadas a la espalda.
Al escuchar el portazo, el Sr. Edward se dio la vuelta y se acercó a Daniel.
Alexander se apoyó contra la pared, cruzando los brazos sobre el pecho, y Mario se paró al lado de Daniel.
—¿Has olvidado quién eres Sr. Edward? —preguntó.
—La mantendré feliz para siempre —dijo Daniel, mirando directamente a los ojos del Sr. Torres.
—La estás sacando de un infierno para arrojarla a otro —dijo Alexander.
—No dejaré que nada le pase a ella —pro