58. Comida para cerdos
Samir Rahal se encontraba en el despacho de su ostentosa mansión, uno de sus hombres apuntaba con un revólver a la frente de Sujen, mientras que él disfrutaba de una calada de uno de sus puros cubanos favoritos.

—Sujen, Sujen, estás haciendome perder la paciencia querida, y deberías saber que cosas muy malas suceden cuándo eso ocurre.—le dijo el hombre consiguiendo que todo el cuerpo de la mujer en cuestión temblara como gelatina.

—L-lo lamento ssseñor, pero es que… Es que no sé de qué me está hablando.

Samir chasqueó la lengua con fastidio y le pidió a uno de sus hombres que abriera la puerta para que su informante entrara en la sala.

—Muy bien querida, veamos si ella puede explicártelo mejor que yo.

En eso la puerta del estudio es abierta y Haifa aparece en el lugar vistiendo de manera majestuosa y caminando directo hacia el hombre que se reclina en su asiento para permitir que la mujer se siente en sus piernas.

—Haifa, cariño, porque no le cuentas a nuestra invitada qué es eso
Lizzy Bennet

Mis amoooooores, que aquí les dejo un extraaaaaa!!! Ya podemos ver un poco más de nuestro villano !!! Espero que les haya gustado, besooooos

| 46
Sigue leyendo este libro gratis
Escanea el código para descargar la APP
Explora y lee buenas novelas sin costo
Miles de novelas gratis en BueNovela. ¡Descarga y lee en cualquier momento!
Lee libros gratis en la app
Escanea el código para leer en la APP