233. NAUFRAGIO
Christie ha llegado a la casa junto con su guardaespaldas, y corre a abrazar a David y se echa a llorar, porque se ha enterado de lo que le pasó a su hermano.
—¿Cómo está mamá? ¿Ya se enteró?
—No le he dicho nada. ¿Qué fue lo que te pasó? Y no me digas que nada, porque tu secretaria me llamó.
—Ese estúpido hombre que compró a Adele, se metió en mi oficina amenazándome con no dejarme salir, si no firmaba los papeles de matrimonio con él.
—¿Qué? ¿Y dónde estaban tus guardaespaldas ?
—Los había mandado a averiguar dónde estaba Adele, pero papá me llamó para avisarme de lo que le había pasado a Chris, que viniera a cuidar a mamá y lo mandó enseguida y me rescató por ese elevador que te empeñaste en que hiciera personal en mi oficina.
—Ese hombre es muy peligroso Cristi, tienes que cuidarte a partir de ahora de él —le dice volviendo a abrazarla protectoramente.
—Ya se lo dije, señor David, qué debe de cargar un arma con ella, pero no me hace caso— interviene el guardaespaldas pe