Noah tan solo resopló, en silencio era observado como si hubiese salido debajo de la tierra, no era tonto y a la brevedad supo que no se trataba de una reunión rutinaria de la empresa debido a las personas que se encontraban allí dentro.
William fue quien se llevó las peores miradas, ya que se encontraba ocupando la silla de presidencia, Noah dando pasos cortos ingresó.
—Me gustaría saber, ¿quien los ha invitado a pasar, y qué rayos están haciendo aquí? —William de manera astuta y sigilosa guardó los documentos dentro de su maletín, preparándose para lidiar una terrible discusión.
—He sido yo —interrumpió a Emily, Noah levemente giró la cabeza y conectó la mirada con ella, en aquel momento Noah sintió deseos de tomarla por el cuello y retorsérselo.
—¿Tú?, ¿pero con qué derecho lo has hecho? —cuestionó Noah mostrándose molesto—. Ustedes fuera de mi empresa, no sé que rayos estaban planeando hacer, pero lo mejor es que se bajen de esa nube, porque ya estoy aquí.
Todos hicieron mala la