Nicoletta estaba algo tensa por como Björn se había puesto, sabía que luchaba a diario con sus problemas de ira, y por ello había dudado en mostrar la evidencia esa misma noche, pero era mejor de una vez para quitarse de encima a Christine y a Bruno.
—Dime algo, ¿Y qué pasó en la cena de beneficencia? —Björn arrugó su ceño y entendió lo que estaba preguntando.
—Ya debes de saberlo, ¿Qué no todo lo hablan mi madre y tú?
—Bien, solo quería que tú me contaras. —contestó ella arqueando de nuevo esa ceja perfecta. —Efectivamente, estamos al día de todo.
— ¿Eso quiere decir que la tienes al día con lo que sucede conmigo y mi asistente? —ella presionó sus labios con dureza, se dio un tiempo antes de contestar esa pregunta, tomó un sorbo y lo disfrutó