Anastasia.
Después de haber amenazado a Cintia me dirijo hacia adentro, al entrar ya está listo el desayuno, el ambiente se siente muy tenso no le doy importancia solo empiezo a comer no me siento con ánimos de nada, Sebastián se aclara la garganta llamando la atención de todos.
-¿Qué tal si salimos a pasear al mercado o aun lugar bonito que te guste, que te parece Anastasia.
Lo miro y lo pienso un rato no tengo ganas de verle la jeta a la demás gente, Julio le intenté ayudar.
-Si, mi cuñadita tiene razón qué tal si vamos a la laguna.
Sebastián lo mira.
-Cómo me llamaste.
-Qué te parece Anastasia.
Julio ignora totalmente el enojo de Sebastián, la laguna suena agradables, le sonrío y asiento en la cabeza, todos miramos a la abuela, nos mira y suspira.
-Está bien tienen 5 minutos para alistarse.
-Vamos.
Me levanto de la mesa y salgo corriendo a mi habitación, estoy buscando mi ropa y Julio pasa como si nada.
-Viej