Decepcionado de la desconcertante situación, baja al comedor.
_ Hola hijo, buenos días¿No bajara Paulina para desayunar?_ Pregunta Anna.
_Creo que no mamá _ Le responde él _ Con un tono triste, desanimado.
Anna lo mira extrañada, se suponía que su hijo debería estar feliz.
_¿Qué sucede? ¿Porqué estás así?_ Le pregunta ella.
Patrick quería decirle, sintió en ese momento la necesidad de desahogarse, pero luego pensó que era mejor que solucionará él mismo cualquier problema con Paulina.
_ Nada mamá, no te preocupes, me pides un café por favor _ Le responde él.
Al mismo tiempo en la habitación, Paulina habla con su amiga.
_Mis plan era enloquecerlo de placer, volverlo loco por mi, pero no puedo aceptar que me haga el amor, una cosa son los besos y los abrazos, y otra muy diferente es sentirlo dentro de mi, eso es demasiado, anoche estuve a punto de gritarle cuanto lo odio.
_ Tú fuiste la que decidió conquistarlo, yo sabía que no ibas a poder hacer el amor con él, ahora