Sólo reí de nervios y les copie a las chicas que se fueran sin mi, claramente su mensaje me hizo sonreír y aunque era de apoyo y gracias por invitarlas a ese mágico lugar.
Es cierto que era mágico y te sentías en otro mundo muy diferente, mire con asombro como los clientes eran educados y sabían esperar, y como mis tías y madrina ayudaban y atendían, e incluso cantaban un poco; vi el gran cierre a través de la gran pantalla y ver esa piruetas tan sutiles y delicadas, me hizo desear ser otra sirena.
Al ver como todos se iban pude ver sus caras relajadas y felices, claramente mis 2 guardaespaldas-padrinos me llevaron al centro del bar y al ver que mi padre se alzaba se detuvo al escuchar al hombre decir
Hombre misterioso: valla, valla, tenemos una Sirenita fugitiva.
Padre: a que te refieres con eso detective Mc Fly. -girando para verme-
Mc Fly: oye…. Otra vez