—¡Salta!

Lo hice y seguí corriendo lo más rápido que podía. Arthur estaba muy estresado, molesto y preocupado así que no cometía ningún error para no molestarte más.

Cuando volví a saltar algo nos atacó de lado y nos hizo rodar varios metros muy alejados uno del otro. Tomé mi forma humana rápidamente y vi para todos lados buscando a Arthur y a los atacantes pero el segundo sería muy difícil de encontrar.

Encontré a Arthur de otro lado de la calle y se sostenía el costado: estaba lastimado. Traté de correr hacia él pero algo me empujó aún más lejos, agudicé todos mis sentidos como una vez me enseñaron y di un paso adelante para luego dar una patada al aire y luego ver como se formó un agujero en la pared de un edificio.

—Bingo.

Arthur parecía estar en problemas así que corrí hacia él sin interrupción