Capítulo 135 —La guardia baja
Narrador:
El sobre estaba sobre el escritorio. Roman lo abrió sin vacilar. Leyó cada palabra con calma. Al terminar, dejó los papeles a un lado y marcó un número desde su teléfono personal.
—Necesito que vengas a la casa, hoy, en persona.
El abogado no hizo preguntas.
Una hora después, el hombre entraba al despacho con un maletín en mano y el ceño fruncido.
—¿Qué pasó?
Roman le entregó la citación sin decir una palabra.
El abogado la leyó detenidamente. Sus ojos se endurecieron al pasar la segunda hoja.
—Está formalizado. La demanda de Miranda es directa y con fundamentos. No va a ser sencillo.
—¿Qué implica exactamente?
—Primero, la audiencia de presentación. Quieren demostrar que Miranda nunca estuvo muerta y que tú lo sabías desde el pricipio. Si logran sostenerlo, anulan automáticamente tu estado de viudo y te devuelven la condición de casado.
Roman se apoyó contra el escritorio.
—Y con eso, el matrimonio con Aylin queda anulado.
—Así es, pues tu marti