—Cuando dijiste que le traías un regalo a los niños, esperaba una sonaja o ropita —dijo Román caminando de un lado para otro como león enjaulado—. ¡No al maldito de su padre!
—Oye… baja la voz, estamos en un hospital… —dijo Marco tranquilamente.
—Eres un… —Román avanzó amenazante y tomó a Marco po