Nicole cogió un tenedor nuevo y comió un pedazo.

“Este pastel es bajo en grasa y bajo en azúcar. ¡Solo hacen cantidades limitadas y es perfecto para un refrigerio nocturno!”.

Clayton sonrió. Aunque no fue tan difícil de comer, él tenía un trauma psicológico con los postres, por lo que no tomó un segundo bocado.

Nicole tampoco lo obligó y pronto terminó el pastel con el Pequeño Michael.

El Pequeño Michael se fue obedientemente a la cama.

Clayton la acompañó hasta la puerta, Nicole se despidió y se fue.

De repente, se percató que olvidó su teléfono y se dio la vuelta para buscarlo.

Sin embargo, tan pronto como entró, vio a Clayton apretándose el pecho y vomitando.

El rostro de Nicole cambió cuando pensó instantáneamente en el postre.

Sin embargo, antes de que ella pudiera acercarse, Clayton la vió. Él miró el teléfono en la mano de ella e inmediatamente entendió.

Él sonrió y tomó un papel toalla. Sus ojos todavía estaban anormalmente inyectados con sangre.

"¿Te asusté?".

Nico