CAPÍTULO 36 + 37. FIN
Capítulo 36:
Añorando
un solo
rostro.
Andrea paseaba por el bosque junto a aquel que tanto cuidaba de ella, se sentía realmente agradecida de tenerle, él era lo único que le quedaba después de todo, él era su única familia, a parte de sus amigas las hadas.
- Ella estará bien – aseguraba Ebrain, mientras apretaba su mano, para transmitirle un poco de paz.
- Hace meses que se marchó – decía la joven, entristecida – quizás ya esté muerta.
- ¿no hay forma de que puedas llegar allí? – preguntaba él, mientras ella le miraba sin comprender – puedes ir a ver a tus padres,