―¡Viktor! ―grité en cuanto se levantó del sillón y se acercó feroz hacia Armin, tomándolo por el cuello de la camisa y poniéndolo contra la pared.
―¡¿Qué se supone que estás haciendo?! ¡Suéltalo! ―exclamó Mina furiosa.
―Como no pudiste acercarte a Layla, ¿ahora intentas acercarte a Mina? ―preguntó Viktor entre dientes mientras su hermana se colgaba de su brazo, queriendo rescatar a Armin.
―¡Suéltalo, Viktor! ¡¿Estás loco?! ―gritó Mina frustrada por no poder separarlos.
―¿Tu hermana? ¡Vaya que tengo suerte! ―dijo Armin con una sonrisa torcida antes de empujar a Viktor haciéndolo retroceder―. Mina, yo