Capitulo 3

Tatiana sube a su habitación y empieza a danzar dejándose llevar por la emoción del momento y el placer de lo vivido, una mujer como ella que siempre se tuvo que acostumbrar a ser la sombra de su hermana fue capaz de provocar la pasión en un hombre que siempre vio lejano. Aún recuerda la primera vez que vio a Santiago, el como siempre lleno de vitalidad y de fuerza, un macho con modales que podía colmar su corazón de fuerza nunca antes se había sentido tan atraída por alguien pero como siempre su hermana estaba de por medio, ella se había comprometido con el y ella no podía hacer más que esperar pacientemente a ver la felicidad desde la mirada de una cuñada.

Nunca había sentido que un hombre podía llevarla a las estrellas, sentía que el era todo lo que ella necesitaba, quizás se basaba en el poco cariño y atención que su padre le daba sentirse importante para alguien de muchas maneras llenaba sus vacios emocionales pero en especial la hacia sentir valiosa algo que se le había negado desde la muerte de su madre.

Todo era diferente en la habitación de Cecilia, ella se sentía sucia y usada después de vivir lo que debió ser la mejor experiencia de su vida, Carlos se le había metido de lleno en el corazón y estaba dominando por completo su cabeza pero ahora no sabía que debía hacer, acababa de enfermar a su padre, había terminado con el compromiso y sobretodo le había entregado su virginidad a la persona equivocada, acababan de agarrar su corazón para convertirlo en una bola de papel y lanzarla al vacío más profundo y oscuro, dónde ni ella misma podía rescatarlo, se siente en una terrible encrucijada dónde el camino que debe tomar esta lleno de espinas, sabe que cualquier decisión que tome la lastimara.

Santiago por su parte bebe una copa de whisky mientras mira el fuego de la chimenea de su gran mansión, la rabia que siente por perder en contra de su primo es algo que no lo deja respirar, siempre se sintió superior a el y lo fue en muchas ocasiones pero sentía una especie de envidia cada vez que Carlos lograba algo que el no, que conquistará el corazón de Cecilia es un golpe tan bajo que no quiere volver a verlo.

El mejor amigo de Santiago, Hernán Linares, decide visitarlo al ver los mensajes que dejo en su buzón de voz : —¿Cómo estás?— pregunta estúpidamente ya sabe que su amigo en este momento debe de estar furioso.

—¿Es enserio tu pregunta?— frunce el ceño Santiago mientras termina su trago que pasa amargo por su garganta.

— Si, lo sé , es estúpida, estoy preocupado por ti te conozco mejor que nadie y me imagino que debe dolerte lo que está pasando — Hernán sabe que el ego de su amigo es frágil y en esa fragilidad generalmente trae serías consecuencias pues es un hombre que no sabe asumir un fracaso en especial no sabe lo que se siente perder algo tan preciado —¿Que piensas hacer?— lo conoce tanto que sabe detrás de esa actitud derrotada hay un plan que no quiere escuchar pero como buen amigo decide hacerlo

— Ya tome una decisión, Cecilia va a derramar lágrimas de sangre, ella va a pagar muy caro todo lo que me hizo y le voy a dar dónde más le duele pero todo lo sabrás a su debido tiempo - Santiago habla con tanta frialdad que su amigo sabe está situación no será para nada buena, sabe que el está a punto de cometer un error que le puede costar mucho mas de lo que él va arriesgar pero quiere apoyarlo ser ese amigo incondicional que pueda aconsejarlo cuando ese mundo maquiavélico que creo se vaya a abajo.

************ Amanece ***************

Tatiana y Cecilia se dirigen al hospital necesitan saber de su padre, sin lugar a dudas la angustia de saber cómo había seguido Peter no les dejo dormir : —¿Cómo está papá?— pregunta una alterada Cecilia con su corazón latiendo tan rápido como el de un caballo de carreras, la culpa la hacen sentirse fatal.

— Ya pueden llevárselo a casa, un joven vino muy temprano y está con el en su habitación — el médico se retira dejando en dudas a la joven sobre quién es el hombre que está visitando a su padre.

Las dos entran a la habitación y ven a Santiago que sonrie con su padre, pero la cara de los dos hombres cambia al ver a Cecilia llegar : — El doctor me dijo que podía llevarte ahora mismo a casa — ella intenta tomar la mano de su padre un gesto habitual en ella pero el de inmediato la esquiva.

La decepción que siente Peter por la falla de su hija hacen que el hombre no quiera no verla a los ojos, ella que había sido el motivo de sus orgullos ahora es el motivo para agachar la cabeza, la vergüenza que siente con Santiago no se iguala a ninguna otra, le exige a Tatiana que sea ella quien cuide de el, ella sigue sin entender todo lo que sucede pero obedece, por primera vez su padre la toma en cuenta a ella y no a su hermana, es casi un motivo de celebración para ella.

Al llegar a casa las cosas no mejoran : — Lo mejor es que te vayas a tu habitación, Santiago y Tatiana me cuidarán no quiero hablar contigo — sus palabras son de hielo al ver a su hija que agacha la cabeza.

El hombre se queda dormido dandole la posibilidad a los amantes de fugarse un momento a la casa de atrás, un espacio reservado por Peter para sus tardes de soledad dónde escribía poemas mirando el jardín de la casa, recordando lo hermoso que su amor con la madre de sus hijas, es el lugar más privado que encuentra Tatiana para hablar con su ex cuñado : —¿Que paso ayer?— pregunta tímidamente mientras coloca un mechón de su pelo detrás de su oreja y agacha la mirada, intenta cubrir con el otro poco de su cabello la cicatriz que ha marcado su vida de inseguridades.

— Los dos queríamos desde hace mucho tiempo sentir lo que sentimos ayer ¿Estoy equivocado?— Santiago usa aquel tono seductor con el que muchas mujeres caen a sus pies y Tatiana no es la excepción.

— ¿Es una especie de aventura?— pregunta intentado decifrar lo que sucede como pasó de ser la sombra de la familia a ser la figura principal en la obra de teatro que es su vida — Hasta hace solo unas horas eras el prometido de mi hermana, querías llevarla al altar porque era " perfecta" no entiendo porque ahora besas a la papito feo, a la invisible de la sociedad que te rodea — ella no puede entender la actitud del gigolo de su círculo social.

— Quizás necesitaba golpearme con un muro para darme cuenta que eres la mujer que siempre desee — Santiago acaricia su rostro, odia sentir aquella cicatriz arrugada en la belleza de Tatiana, siente asco pero disimula con una sonrisa, siente que está haciendo un gran sacrificio pero que debe hacerlo para vengarse de Cecilia.

Tatiana cierra los ojos mientras su corazón late, siente como el se acerca a sus labios y la besa con tanta pasión que ella de queda perdida en aquel beso como si el mismo tiempo se detuviera para la dos, Santiago la toma de la cintura y lentamente la hace retroceder hasta una mesa que hay detrás de ellos, la carga para subirla sobre ella y tener un acceso total a su boca, mira al techo pensando en todas las bellas mujeres que un día tuvo en la cama para poder seguir besando a una mujer que no le provoca más que lastima y algo de asco pues esa cicatriz que enmarca la cara de Tatiana desde la ceja hasta cerca de su labio es algo desagradable para un hombre acostumbrado a solo tocar bellezas.

El abre las piernas de la mujer con algo de brusquedad metiendo sus manos bajo el vestido y en un ágil movimiento le quita la pantaleta mientras ella abre los ojos algo asustada, el intenta quitarse los pantalones para tener acceso a ella , Tatiana lo toma de las manos siente que van muy rápido y está dejando atrás el romanticismo que siempre soño además debe hacer una confesión :— Santiago, soy virgen — suspira.

El abre los ojos sintiendo un baldado de agua fría, pensaba que después de verla cabalgar sobre la almohada ella ya tenía experiencia en el sexo pero ahora se da cuenta que no es así que ella es solo una inexperta : — Yo....— no sabe que decir, nunca había tomado a una virgen, pensaba que Cecilia sería la primera en su vida pero la tentación que significa Tatiana cambia su panorama.

— Quiero hacerlo, ya no soy una niña, hace mucho he fantaseado con la idea que seas el primero — ella lo jala del cuello besándolo mientras alza sus manos para que el le quite la blusa pero Santiago se aleja, no puede hacerle esto, estaba decidido a hacer todo lo que pudiera para vengarse de Cecilia pero al ver los ojos llenos de amor de Tatiana se da cuenta que su ego le está jugando una mala pasada.

— No puedo hacerlo — se va corriendo de allí dejando a Tatiana desconcertada sintiendo que ella cometió algún error que se le está cobrando muy caro.

Ella empieza a llorar pensaba que el seria el amor de su vida «Estúpida» piensa dándose golpes en la cabeza pues siente que sus sueños son solo eso fantasías en su cabeza que nunca serán realidad pues ella nunca será tan buena y perfecta como su hermana.

Santiago sale de allí con miles de cosas en la cabeza, piensa no solo en Tatiana si no en Peter y lo bueno que ha sido con él «¿Que estás haciendo?» se pregunta una y otra vez a su mismo.

—¿Podemos hablar?— se acerca Cecilia que quiere remediar sus errores e intentsr recuperar su vida.