(Seis años atrás).
—Tengo que cortarme el cabello, ¿no lo crees? —le preguntó Peter a Pilar mientras ella enterraba sus dedos entre las rubias cerdas de su esposo, masajeando con sus uñas el cuero cabelludo.
Se encontraban en un enorme parque casi a las afueras de La Ciudad, específicamente en su