La conversación de ahí en adelante fue trivial. Ella había terminado de estudiar la preparatoria con honores y quería estudiar en Europa.
—¡¿Cómo que en Europa, Nahia?! —rezongó Austin acelerando—. ¡Yo acabo de llegar!
Ella lo miró a través del espejo y asintió.
—Lo sé, Austin. Pero ¿qué me quier