—Hola, papá...
Aquello fue suficiente para que a James se le salieran las lágrimas que había estado tratando de aguantarse desde hacía horas, la levantó en sus brazos y la estrechó con fuerza mientras la besaba.
—Me asustaste mucho —la acusó haciendo un puchero mientras la besaba.
—Lo sé, amor, p