"Que inicie el juego"
Ethan entra a la casa con una sonrisa llena de suficiencia y con las compras en la mano, las coloca sobre el mesón y las risas de sus amigos no tardan en llegar.
—¿Enserio fuiste tú solo? —comenta Ryan entre divertido y juguetón, haciendo que Esteban y Fredd se acerquen al mono con hormonas alborotadas de apellido famoso.