Nos quedamos mirando y en silencio por unos minutos, le sonreí.
—Tu plan está funcionando, Isaac, supongo que le has dicho o demostrado tu interés —cuestionó ella.
—¿Tu Dylan sabe de este plan? Supongo que ha visto nuestras fotos, ¿eso no afecta su relación? —pregunté evitando darle una respuesta.
—No lo sé y a decir verdad no importa, lo nuestro nunca podría ser, él está enamorado de alguien más.
—¿Lo está? —pregunté y consideré aquella una oportunidad—. ¿Tú y él no pretenden solucionar las cosas?
Ella sonrió y bebió de su jugo sin responder nada.
«Así que tengo una oportunidad» pensé.
—Ángel, hay algo que me gustaría decirte. Ángel yo…
Su teléfono sonó y ella rechazó la llamada.
—¿Tú que Isaac?
—Ángel, yo quiero decirte que me estoy enamorando de nuevo, estoy enamorado de…
—Lo siento, debo responder —dijo y pude ver en su teléfono que se trataba de Dylan.
Ella se levantó, no escuchaba lo que decía, pero se observaba que era una situación tensa, suspiré y Arturo se sentó a mi lado.
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