"Melissa"
Me levanté del sofá donde estaba conversando con Catarina para atender la puerta, sorprendiéndome al ver a Giovana parada ahí, toda arregladita, con una sonrisa contagiante y el brazo en cabestrillo.
—¡Hola, Mel! —me dio un abrazo apretado.
—Ah, pero mira quién apareció. Te estaba extrañando. ¿Por qué no te he visto? —quise saber, pues no la veía hace días.
—Estuve pasando unos días en casa de mi abuela, después de que salí del hospital mi papá me llevó para allá, pensó que necesitaba a alguien que me cuidara todo el tiempo —explicó y entendí por qué Rafael estaba cenando con los amigos el día que la hija sufrió el accidente.
—Hizo bien. Mira, esta es mi amiga Catarina, casada con Alessandro, que tú dices que está guapísimo —bromeé y se sonrojó un poco.
—Mi marido sí está guapísimo —Cat se rió y la saludó.
—Pero tú también eres muy linda —Giovana abrazó a Catarina.
—Tengo algo para ti, Gi. Voy a buscarlo —fui hasta el cuarto y tomé la bolsita con el regalo—. ¡Feliz cu