"Melissa"
Me habría gustado mucho quedarme un poco más en mi burbuja de luna de miel con mi príncipe, pero también estaba feliz de estar de vuelta. Ya extrañaba a todos y mi trabajo. Tenía tantas ganas que hice que Fernando me dejara en la oficina más temprano.
—Deberíamos habernos quedado en Suiza. A esta hora estaría besando tu cuerpo. —Fernando se quejó dándome un beso en el cuello antes de que saliera del carro frente a Lince.
—Puedes besar mi cuerpo en nuestra cama nueva esta noche. —Sonreí.
—La noche va a demorar mucho en llegar. —Se quejó.
—Ve a trabajar, Fernando, ahora tienes esposa y un montón de hijos que mantener. —Bromeé y se rió.
—¿Vieron, niños?, mamá ya se cansó de papá. —Habló con la mano en mi vientre.
—¿Vieron, niños, cómo es de dramático papá? —Entré en su juego.
—Está bien, me voy, ¡pero bajo protesta! —Sonrió—. ¡Te veo más tarde, abejita!
Me despedí de mi marido y entré a la empresa, me demoré más de lo que imaginé para llegar a mi piso, había mucha gente