"Patricio"
Flavio me estaba mirando con la mano en la cadera y estaba hasta medio rojo, parecía nervioso y a punto de entrar en una guerra.
—¿Quién vino detrás de Lisandra? —pregunté y caminé hacia ella, que parecía estar pegada a la silla, pues no se levantó a abrazarme como siempre hacía.
—¡Ese cretino de Guilherme Pontes! —despotricó Flavio y el nerviosismo se apoderó de mí.
—¿Qué quiere ese desgraciado viniendo detrás de mi novia? —pregunté sintiendo cierta aflicción.
—¡Ese idiota vino a cobrar el matrimonio! ¡Exigir que Lisandra honre la palabra de mi madre y se case con él! —Flavio estaba irado y yo también—. Hombre, no sé dónde tenía la cabeza mi madre.
—¿Ese estúpido perdió completamente la razón? ¿Qué tiene en la cabeza? —pregunté, sintiendo la irritación crecer dentro de mí—. Mi dulce, atraes problemas en cuanto pones los pies fuera de la oficina, ¡es impresionante! No vas a salir más sola de esta oficina.
—Patricio, él vino aquí. —habló Lisandra con voz baja y desanim