"Heitor"
Me sentía pésimo, apenas tenía cabeza para trabajar. Mi padre estaba haciendo mi vida un infierno, queriendo más dinero y ese viaje a Europa. Pensé que cuando recibiera la mensualidad se iría, pero no, esta vez parece que quiere arrasarnos a mí y a mi hermana. Mi madre encadenó un viaje con otro y me aseguró que solo pondría los pies en la ciudad nuevamente después de que "el demonio fuera expulsado" y lo peor es que tiene razón, desde que él llegó mi vida es un infierno.
Para empeorar, recibí un mensaje de Hebe queriendo saber por qué Isabella anda diciendo que estamos juntos. Ni siquiera sé de dónde sacó eso mi hermana. Mejor la llamo y veo qué está pasando.
— Hola, Hebe! —digo desanimado cuando contesta.
— Es bueno que tengas una buena explicación, Heitor. —Estaba furiosa.
— Hebe, yo no estoy con Isabella. Solo me acosté con ella algunas veces en los últimos días... —Ni me dejó terminar de hablar.
— ¿Cómo es eso, Heitor? Aprendiste bien de nuestro padre, ¿eh? Y todaví