"Manuela"

Desde mi almuerzo con Rick justo después de mi cumpleaños, habían pasado muchas cosas. Pasaron los meses, y finalmente, ese tal Junqueira fue arrestado por mi jefe de policía, que cada vez estaba más guapo. Mi relación con Flávio fluía con naturalidad, sin complicaciones. Solo mi madre insistía en darme la lata con frecuencia.

El tiempo pasaba muy rápido y yo estaba muy ocupada. Empecé a ver a mi madre cada vez menos, pero cuando lo hacía, siempre me arruinaba el día. Insistía en que si no regresaba a mi pueblo, vendría y me llevaría a la fuerza. Ya le había dicho que no volvería, y que no podía obligarme, pero aun así, temía que viniera y me arrastrara de vuelta. Así que me quedé en casa de Flávio, sin importarme el paso del tiempo. Llevábamos meses juntos, y era hora de pensar en volver a casa. Al final, tendría que enfrentarme a mi madre. No quería volver a mi apartamento, no después de acostumbrarme a dormir y despertar cada día en los brazos de Flávio. Pero tenía que vo