Melania Castello
Al entrar a casa el diablo me apunta en la nuca con su arma sin lograr intimidarme un poco. Favrizio me entreno muy bien para no mostrarle miedo a mi enemigo, nunca bajar mi cabeza ante él y menos pedir clemencia por nuestra vida.
Primera lección.√ Nunca subestimes a tu oponente por más débil que se muestre. No hay oponentes débiles, entendido.
Segunda Lección.
√ Jamás le bajes la cabeza o pidas clemencia a tu rival. Es de cobardes hacerlo. Míralo fijo a los ojos cuando te apunten, así sabrás quien te aniquilo.
Tercera lección.
√ Dispara primero antes que el oponente... Y una última lección, hija. No te enamores. El amor es más peligroso que tu propio enemigo.
Creo que mi