Pasó una semana y todo iba bien. Marcus regreso con su hijo Kevin de sus vacaciones y Moira volvió a trabajar cuidándolo, aunque le avisó que planeaba renunciar pronto.
Marcus lloriqueo un poco por eso, pero fue tan comprensivo como siempre. Entendió sus motivos y le dijo que apreciaba el tiempo que había trabajado para él y que esperaba seguir en contacto después de eso. Ignorando el tono coqueto, Moira le agradeció por todo y le aseguró que seguirían siendo amigos.
Renunciaría cuando la situación con Ibiza estuviera controlada, decidió.
Sabía que Zack ya estaba a casi nada de acabar con ese hombre horrible que quería acabar con su vida.
Ahora que se quitó ese peso de encima, decidió ir a visitar a su hermana el fin de semana.
Sabía que había vuelto a enfermarse, aunque le dijo que solo era un resfriado, pero de todos modos estaba preocupada así que fue a verla.
Dejó a Lutxi jugando con su primo Ricky a sus cosas de ciencia y fue a ver a su querida hermana mayor.
Encontró a Lilly