Vivian, se apresuró a su cita con Andrew, no quería llegar tarde, aún no había encontrado las palabras para darle fin a sus encuentros, no quería ser cruel, por primera vez no quería herir a uno de sus amantes.
Cuándo llegó Andrew, ya la esperaba. Se puso en pie para recibirla y le dedicó una amplia sonrisa. Vivian se sintió terriblemente culpable.
Andrew, le corrió la silla y le hizo señas para que se sentara, luego tomó asiento frente a ella.
-Y bien Way, ¿qué deseas comer?
-No tengo hambre Andrew, si a ti te apetece comer por mi está bien, pero yo solo tomaré un café.
-En ese caso, yo también tomaré solo un café- el mesero se acercó y Andrew, hizo su pedido. Vivian, lo miraba sin saber cómo comenzar- ¿ qué tal tu mañana Way?
-Tranquila. . . bastante tranquila.
-Eso es bueno, siempre he pensado que te agitas demasiado.
-Solo trabajo Andrew, como