Mientras ayudaba a Spencer a empacar sus cosas, le conté con lujos y detalles todo lo ocurrido en el juicio y en la conversación con Chloé antes de que llegarán sus abogados. Le mencioné mis ligeras sospechas sobre Gabriel y él se quedó pensativo, sin dejar de doblar cada prenda.
—Voy a mover mis contactos, investigaré a Gabriel y a los abogados, cualquier guardado que tengan lo voy a descubrir. Es importante que no le menciones esto a nadie, ni siquiera a Álvaro, tenemos que asegurarnos antes de tomar medidas.—Spencer habló después de un largo rato y estuve de acuerdo con su plan.
Una amarga sensación se alojó en mi pecho y es que aún me costaba creer que Gabriel sea capaz de esto, ¿Qué diablos quería lograr?
A estás alturas no confiaba en nadie, ni siquiera en mi mejor amiga, ni siquiera he tenido tiempo de hablar con ella, o tal vez es que simplemente no quiero dirigirle la palabra.
—Mañana volvemos, quisiera reunirme con tus contactos y contigo, quiero seguir el caso de cerca.—Le