Sin miedo alguno.
Samanta.
—Lamento irme ahora, pero tengo que atender algunos asuntos. —Me dice Alberto, minutos después de llegar a casa.
—Esta bien, no te preocupes. —Le contesto.
Luego de ver cómo este marcha, busco mi laptop y continuo con mi proyecto, aunque no sea en la empresa Love, aún así, pienso lanzar al mercado mi línea de cabello.
Unos veinte minutos después, Mercedes y Gloria posan frente a mí con una maleta cada una.
—¿Todo bien chicas? —Le pregunto al momento de levantar la cabeza, para verla a los ojos.
—Siii, todo bien, es que, me preguntaba, ¿está segura de darnos vacaciones a las dos al mismo tiempo? Es que Andrea también está de vacaciones—Pregunta Gloria.
—No se preocupen chicas, Alberto y yo, tenemos todo bajo control. —Le digo con una sonrisa.
En ese momento tocan la puerta y Gloria sale corriendo abrirla.
La cara de Gloria se arruga un poco al ver a la persona en la puerta.
—Permiso.
—¿Que haces aquí Camila? —Pregunto poniéndome de pie.
—Siempre vengo