Muchas personas tenían una mirada de envidia cuando miraban a Fane, Selena y Daniella.

Después de todo, cómo no iban a sentir envidia cuando dos hermosas mujeres lo acompañaban en este viaje de compras.

Cuando los tres terminaron su comida, Daniella regresó a casa de mala gana.

"¿No viste la mirada reacia de Daniella? Creo que deberías pasar la noche en su habitación". Cuando ellos volvieron a su propia habitación, Selena puso los ojos en blanco ante Fane y dijo con impotencia.

Inesperadamente, Fane frunció el ceño y le dijo a Selena: "¡Cariño, no dejo de sentir que algo anda mal con Daniella pero no sé qué es!".

"¿Qué pasa?". Selena estaba desconcertada.

"No sé. De todos modos, cuando la tomé de la mano durante el viaje de compras de hoy, se sonrojaba mucho. Ella es tan tímida como una señorita pura y siento que algo anda mal". Fane lo pensó antes de decir su sospecha en voz alta.

"Lo estás pensando demasiado. ¿No es normal que una chica sea tímida? Además, en el pasado no la t