Me tiro en la cama solo sacándome la corbata y al cerrar los ojos lo único que puedo ver es aquella noche de tormenta.
- Kendal, Kendal.
Me despierto y escucho la voz de Blanca desesperada tocando mi puerta y a lo lejos puedo escuchar uno que otro trueno, se me dibuja una sonrisa porque sé que tiene miedo, me lo dijo antes de irnos a nuestras habitaciones que no le gustaba la tormentas, simplemente pensé que no era para tanto.
- Tranquila, no pasa nada, es sólo la tormenta.
Le digo abriendo la puerta y el impulso que tuvo de abrazarme h