Capítulo 5

Cuando kile cerro la puerta cambie mi expresión. Lo que dijo Marc me dolió un poco, pero es mejor así. Él y yo jamás podemos tener una relación. Eso afectaría su amistad con Ana y Ana lo necesita. Además yo me prometí que solo tendría sexo y con él me siento diferente así que es peligroso para mí.

Elegí a kile en la fiesta después de verlo con Kimberly y lo hice precisamente porque es todo lo opuesto a Marc. Pero es tan opuesto que después de tener sexo no me siento para nada satisfecha, no me hizo sentir ni la mitad de lo que siento con él. Pero esto es lo que hay

- que pasa entre tú y ese chico?

- no creo que sea de tu interés!

- pues yo creo que sí. Por como lo veo nos vamos a seguir encontrando- no sé que se piensa este chico, pero para nada pienso entablar ningún tipo de relación con él. Ni tan siquiera solo sexual. No es malo en la cama, pero no es lo que necesito. Muy cursi y romántico, yo quiero sexo rompe huesos.

- no creo que vayan a encontrarse más porque no pienso verte más

- ¿a qué te refieres? Pensé que lo habíamos pasado bien- más bien, lo disfrutaste tú. Pensé para mis adentros

- así es, pero no quiero ningún tipo de relación. Ni siquiera sexual

Terminó de vestirse en silencio y cuando iba de salida me miro

- lo que dice ese chico es cierto. No tienes sentimientos

- lo sé. Nunca te dije que los tenía

No me importaba que él lo dijera, de hecho él no me importaba para nada. Pero saber que eran palabras de Marc me hería.

Salí de casa a caminar y acabé delante de casa de Ana, pensé en entrar, pero no estaba de ánimo para hablar con nadie. Me sentía frustrada y sin saber qué hacer ni con respecto a Marc ni con respecto a nada. Me puse a reflexionar acerca de todo lo que había pasado con Marc. De verdad había sido algo dura con él, pero nos estábamos acercando demasiado para mi gusto, así que lo que tenía que hacer era lograr entablar una amistad y olvidar lo que pasó entre nosotros. Aunque cada vez que lo vea, lo quiera llevar a mi cama. Por decir lo menos, estaría con él sobre cualquier superficie.

No sabía donde vivía, pero llame a unas amistades para que me dieran su dirección, todo el mundo en el instituto savia donde él vivía porque se montaba tremendas fiestas. Había oído mucho de ello, aunque nunca fui.  Llegue al edificio y entré, llame a su puerta y abrió muy ligero de ropa, estoy segura de que no conoce el pudor. Yo tampoco pues lo repasé a conciencia.

-¿Sofía, que haces aquí?-odio cuando me llama Sofía porque me recuerda a mis padres, aunque todos creen que me llamó Sofí el único que tiene razón es él. Mi nombre es Sofía.

- quería hablar contigo

- la verdad no veo de qué

-¿no me vas a invitar a pasar?- sus facciones se contrajeron

- lo siento, pero estoy algo ocupado ahora

- Marc. ¿Te demoras mucho?- sentí la estridente voz de Kimberly y entendí todo

- lo siento. Parece que te pille en mal momento, de todas formas no es importante - me di la vuelta para irme y él me sujetó la mano. Lo miré a la cara tratando de disimular el nudo en mi garganta.

- podemos hablar en otro momento, si es algo importante

- ya te dije; no es nada importante - me solté y salí muy molesta con todo y conmigo misma por creer que de alguna forma Marc era diferente a los demás.