Mundo ficciónIniciar sesiónLa realidad de ver a su compañera muerta, aunque sea temporalmente, es un peso mayor de lo que Miguel podría haber imaginado.
El vínculo que los unía todavía late dentro de él, como una cuerda invisible atada a su corazón, haciéndole sentir la ausencia de vida en el cuerpo de Sasha de una forma casi física. Necesita creer que ella regresará. La diosa de la luna se lo prometió al hacerla su compañera destinada, así que ella volverá. Y, sin embargo, el miedo se infiltra, insidioso, colándose en cada rincón de su mente.
— Sasha... — la llama, su voz temblando con la ronquera del peso emocional, apretándola aún más fuerte en su abrazo, sintiendo su cuerpo ahora helado contra el suyo. Un escalofrío recorre la espalda de Miguel, la incertidumbre y el dolor casi paralizándolo.
Muerde su labio, su mand&ia







