***NARRA CAMILO***
Ciudad de México
Ya cuando estamos en el auto y antes de que Nick lo encendiera y nos saliéramos del club, se me vino una idea a la mente, era más justo para mi bonita que fuera cómoda en la parte de atrás.
– ¿Saben qué, porqué mejor no conduzco yo? – Sugerí – Vamos al departamento entonces y ahí pedimos la comida.
–Gracias Camilo, así es mucho mejor, para yo ir apapachando a mi princesa. – Dijo Nick melosamente.
Era un cara dura, como si de verdad sintiera algo por Grace, que cinismo el de ese hombre, pero me iba a tener que escuchar. Ella no se merecía lo que le estaba haciendo. Nick se subió atrás con Grace y yo me subí adelante para conducir. Ella cerraba los ojos lentamente hasta que en medio de tantos besos que Nick le dio ella cerró los ojos y se quedó definitivamente dormida.
Yo aproveché ese momento para hablar con ese desgraciado de Nicolás. Que ni pensara que me había tragado todo su show de besos y abrazos y de que la extrañó, cuando se había revolcado