— Y pensar que soy la hermana menor, ni yo llego a tanto narcisismo como tú.
Devika me dio un codazo y seguí manejando. Luego de un buen rato llegamos a la playa y la propiedad en la que nos íbamos a quedar no me sorprendió, al final se trataba de la casa de la princesa del Zoco.
— Aramis, la piscina no se encuentra techada. Pensé que lo iba a estar para estas fechas. Disculpa, si estoy siendo muy melindrosa, pero ya sabes mi problema con el sol.
— Lo siento, hermanita. Hubo unas complicaciones y preferí priorizar la piscina de la casa, puesto que ahí vas a pasar más tiempo.
— No te preocupes, sé bien que hiciste tu mayor esfuerzo — ella le dio un beso a su hermano en la mejilla — además traje protector solar. Solo lo dejaré aquí abajo para no olvidarlo en mi cuarto.
Ella sacó su protector solar y miré que era de alta protección, después de eso una empleada llegó a darnos la bienvenida y se acercó a la princesa para decirle algo al oído. Luego de esto se fue con una gratitud de su jef