Capítulo 42; No puede ser.
-Morelli, Morelli, ¿No sabes que es de mala educación sentarse sin ser invitado?
-Vamos, Di Luca, no te enojarás porque le dé a la dama un poco de atención. Dime algo Lara, ¿Cuántos años tienes?, pareces muy jóven.
-Mi edad es irrelevantel- sonrió- no es muy caballeroso que lo pregunte.
-Lo lamento, hermosura. Supongo que tienes la edad suficiente para estar aquí.
-Supone usted, muy bien- sonrió.
-Cuentame de ti, Lara Adam.
-No hay nada importante que contar, soy lo que ve.
-Yo solo veo una mujer preciosa- Giovanni, entrecerró los ojos, su mirada se llenó de maldad, mientras observaba como aquel estúpido hombre coqueteaba con Lara, y ella sonreía muy amablemente. Silvano Morelli, acababa de firmar su sentencia de muerte. El hombre acercó su mano al brazo de ella, Lara sonrió y de manera muy cordial retiró su brazo del toque del hombre.
-Silvano, puedo comprender que estés algo ebrio, pero dime - aunque Giovanni, sonreía su voz era fría como un iceberg- ¿Qué se siente tocar a mí muje