Salgo de la habitación y la veo al final del pasillo, no sé a dónde va, pero se que esta cabreada, no sé si por la broma de su mama, porque estoy aquí o porque respondí por ella.
Echo correr para alcanzarla y cuando finalmente lo hago está de pie junto a un enorme ventanal con una linda vista a un jardín, lleno de flores. Me coloco a su lado, ella me ve seria y luego se fija nuevamente en el jardín.
– ¿Por qué estás tan cabreada? – pregunto mirándola con curiosidad
– ¿Qué haces aquí Eryx?
– Pregunte primero
– me vale mierda que lo hayas hecho, solo responde – me espeta de mal humor y sé que estamos por discutir.
– Ya te lo dije, no mentí – comento serio mirándola.
– ¿Eryx que estás haciendo, a que estás jugando? – suspiro