Black acababa de acompañar a Chloe hasta su coche, está noche no podría acompañarla, tenía mucho trabajo atrasado y un conflicto que resolver. Subió las escaleras hasta su despacho y pudo notar cómo el aroma de Chloe subía por las escaleras hasta el antiguo torreón.

Acababa de descubrir sin buscarlo el secreto que guardaba su compañera, "los humanos y su naturaleza curiosa" pensó en voz alta.

Era verdad que ella no era humana del todo pero aún así lo tenía grabado en sus genes. Tomó asiento en su despacho, abrió la pequeña nevera negra que había debajo del escritorio y se sirvió una copa de sangre.

Cinco veces había encontrado a su compañera y cinco veces la había perdido. Su historia estaba llena de amor y tragedia. Cada encuentro con su compañera era un rayo de esperanza en su vida sombría, solo para ser arrebatado por la cruel maldición que pesaba sobre los de su clan vampírico.

Sonrió con ironía y tomo un sorbo de su elixir de vida. Tenía que ser sincero con Chloe y aunque ha