En otro lugar a las afueras de la ciudad, se podía ver a Scott un poco ansioso ya que le habia avisado de último minuto a esa persona de que iría a verlo, porque deseaba pedirle de favor que les hiciera ese regalo especial a sus hijos, mientras sonreía y recordaba con cariño ese lugar; igual esperaba que en verdad él tuviera tiempo para recibirlos ya que era una persona muy ocupada porque sus servicios eran solicitados por casi todos los mafiosos, políticos, millonarios y artistas.
Llego a una casa algo retirada de la ciudad, la cual en apariencia se miraba rustica y común: una pequeña casa, de dos plantas con un jardín amplio lleno de árboles de limón persa, una casa con una fachada de ladrillos de arcilla negra y laja en el exterior con algunas enredaderas cubriendo algunas partes de las paredes, de ventanas amplias donde se apreciaban unas cortinas blancas y un gran muro que protegía toda la propiedad.
Al acercarse a la entrada fue interceptado por el guardia que vigilaba la entra